Tras el acuerdo salarial que alcanzaron Aerolíneas Argentinas y los gremios aeronáuticos combativos para frenar el conflicto que provocó decenas de medidas de fuerza durante los últimos meses, el Gobierno tiene planeado insistir con la privatización de la compañía, y no descarta acelerar los tiempos.
El Gobierno quiere evitar que el proyecto quede para la sesiones ordinarias de 2025 porque cree que podría postergarse para 2026 por el año electoral. El Ejecutivo sostiene además que busca profundizar las reformas en la empresa previo a su venta.
El proyecto para habilitar que Aerolíneas Argentinas pase a manos privadas ya está en trámite en Diputados. Y el titular de Transporte, Franco Mogetta, había avisado la semana pasada que el plan para AA seguía en marcha a pesar de que aquietaran las aguas en la relación con los gremios.
La Casa Rosada ya acordó con los sindicatos modificaciones en el convenio colectivo de trabajo, que pidieron los empresarios interesados en comprarla. Incluye la eliminación de los pasajes gratis para empleados -por vacaciones, casamiento y períodos festivos- junto con el uso de remises y los asientos de descanso en clase ejecutiva. Se firmó también un aumento del 16%.
Creen que junto a la reforma electoral y, eventualmente, el Presupuesto, la medida podría funcionar como moneda de cambio en las negociaciones con el resto de los partidos, sobre todo los más cercanos, que apoyan esa iniciativa.