Ayer por la tarde un vecino de Guaminí frenó a la altura del
kilómetro 408 de la ruta provincial 65, pensando que el vehículo que estaba
detenido en la banquina necesitaba ayuda.
Lejos de eso, al descender y observar en detalle, pudo ver
que dentro una persona no respondía y que la puerta del acompañante estaba
abierta, por lo que de inmediato llamó a la policía.
Con los efectivos en el lugar se comprobó que el hombre de
40 años estaba muerto, y según el testimonio de científica y peritos, en
principio no tenía en su cuerpo signos de violencia. El rodado estaba a pocos
kilómetros al norte de Laguna Alsina, entre Guaminí y Daireaux.
Del mismo modo, y según refirieron fuentes de la
investigación, en primera instancia no vieron nada inusual dentro de la
camioneta Fiat Fiorino, por lo que la hipótesis de una muerte natural sería la
primera de la lista.
Las investigaciones del caso comprobaron que el fallecido
era Juan Manuel Ferrer, domiciliado en nuestra ciudad, y que la causa del
deceso habría sido una hemorragia, aunque el proceso judicial continúa.