Esta mañana la fiscal Marina Lara explicó cómo fue que
personal militar encontró en la zona de Baterías de Coronel Rosales el cuerpo
de Pilar Hecker, la nena de 5 años que junto con su hermana de 1 fueron
arrastradas por la corriente el pasado 7 de marzo.
En relación a esto sostuvo que “se había dispuesto una tarea
de rastrillaje en la zona del continente, justamente en esa área, lo que es la
zona de Baterías, que está comprendida dentro de lo que es la base naval Puerto
Belgrano”.
En tanto que “personal perteneciente a la infantería de marina
cumplimiento esta orden que se había emitido desde la fiscalía el día domingo, dio
con el cuerpito de Pilar que estaba ubicado en lo que es la línea costera, en
la línea en la que la pleamar va dejando los desechos marítimos”.
De igual forma resaltó que “todo indicaba que el mar las
había arrastrado y la realidad es que era una zona que no se había rastrillado
porque estaba muy alejada. El punto de hallazgo está aproximadamente entre 40 y
50 kilómetros del lugar en que las vieron con vida la última vez”.
En otro pasaje de la charla afirmó que “ayudó al hallazgo la
circunstancia de que el día viernes existieron vientos muy fuertes del sector
sur, suroeste, que derivaron en una corriente marítima que llevó todo lo que el
mar traía para ese lado”.
Sobre cómo continúa el trabajo para encontrar a Delfina, la
magistrada subrayó que “ahora orientando la búsqueda a la parte, posiblemente,
toda lo que es la parte costera continental de la zona, aledaña a la producción
del evento. Es decir, Coronel Rosales, arrancando por todo lo que es la zona de
Pago Chico, Villa del Mar, y se va a seguir obviamente por la parte de baterías
que están realizando las tareas”.
Volviendo sobre el caso de Pilar, “el personal de infantería
de marina el día sábado no encontró nada y el domingo efectivamente estaba el
cuerpito ahí. Teniendo en cuenta lo que manifestaron los peritos en rastros,
sumado a la autopsia, el cuerpo no llevaba muchos días ahí. Es decir que
necesariamente, la cuestión meteorológica, el fenómeno de los vientos y cómo
eso incide en la corriente del mar, finalmente, tuvo como consecuencia que lo
pudiéramos encontrar”.
Por último Lara reconoció que “el cuerpo estaba en un
avanzado estado de descomposición. Lo que permitió el reconocimiento no fueron
las características físicas, sí la característica en cuanto al tamaño, pero
fundamentalmente la ropa, la ropa que llevaba la niña que indudablemente llegó
a la conclusión de que era Pilar”.