Actor de raza y animal de teatro, Jorge Suárez vuelve a la ciudad con "Los Mosqueteros del Rey" junto a Nico Scarpino, Freddy Villarreal y Nicolás Cabré para sostener este gran éxito iniciado ya hace muchos años y multipremiado. Se presentarán el 9 de Noviembre, en el Teatro Don Bosco y el actor conversó con Rubén García en Fm "Me Gusta":
"El director de la obra está feliz, es el mismo director de la obra original. Vinieron a vernos Los Mosqueteros de ese momento, vino Leyrado, Grandinetti, Marrale, todos juntos vinieron ese día y nos dieron el ok que estaba maravillosa la obra, así que a partir de ese momento vivimos con mucha felicidad y con mucha serenidad el hecho de hacer esta obra que fue un acontecimiento teatral hace 32 años con grandes actores y ahora lo hacemos nosotros con mucha alegría porque lo que genera esta obra justamente es eso".
Jorge nos cuenta las claves de este éxito: "El niño que tenemos adentro disfruta mucho de la complicidad con el público, de que todo te salga mal y que la gente se divierta cada minuto más. En la obra estamos tratando de contar "Los mosqueteros del rey", la novela de Alejandro Dumas y todo nos sale mal, todo nos sale muy mal sobre todo a ellos tres. A mí me salen un poquito mejor las cosas, pero no logro, que a ellos les salga bien, estamos tratando hace un año y medio que salga bien y no nos sale bien y eso genera mucha gracia.
Yo creo que justamente lo que hace es despertar la idea y la sensación de que uno solo en la vida no sirve para nada, que uno tiene que trabajar en compañía que tiene que elaborar con los demás, disfrutar con los demás, construir, tratar que los demás no sean algo indiferente para uno".
"Me metí en el conservatorio y le dije a mi padre que iba a estudiar el teatro y me dijo, si lo haces, hacelo bien, quiso decir hacerlo con compromiso, estudiando de verdad, comprometiéndote de verdad. Los dos aceptaron y me acompañaron muchísimo y la verdad que fue una carrera hermosa la que intenté hacer porque el Conservatorio me formó de una manera muy importante, tuve grandes profesores, grandes maestros, después tuve otro maestro muy grande y fue Francisco Javier que fue un gran doctor de Ciencias Teatrales que ya no está entre nosotros, me formó y me dirigió como en 10 obras y después fue una carrera de otros 10 años en el San Martín sin parar y ya después en calle Corrientes.
Mis padres se me acompañaron hasta que se fueron en todo lo que pudieron y creo que es muy importante eso, cuando los hijos dicen quiero hacer algo acompañarlos me parece que está bien, fue muy importante que mi padre me sostuvieran en la idea de ser algo diferente a lo que era la gente habitualmente, fue un golpe raro para ellos, pero pero me acompañaron".
Jorge es un animal de teatro, es su habitat natural: "Yo estoy dos meses sin hacer teatro por algún motivo y me desespero, tengo como una necesidad importante de hacer teatro y eso quiere decir correr la silla, vender una entrada, limpiar el escenario, salir de gira. Llevar el teatro a la gente es hermoso, me conmueve pensar hace 100 años, 200 cuando la gente que hacía teatro salían con las grandes carrozas a hacer por los campos, por el camino, teatro, que maravilla, que voluntad. Es hermoso nuestro oficio de poder llevar el entretenimiento, a mí me conmueve mucho ser actor".