La Cámara de Diputados debatirá el próximo
miércoles en comisión un dictamen para bajar la edad de imputabilidad a los 14
años, con el fin de poder condenar a los menores que cometen delitos
graves. El jefe de Gabinete, Guillermo
Francos, solicitó ayer que avancen con la sanción del proyecto para bajar de
Francos recordó que el Gobierno envió al
Congreso de la Nación ese proyecto en junio del año pasado y señaló al
defender esa propuesta que “quien comete
un delito de adulto, debe pagar una pena de adulto; por lo que proponemos bajar
la edad de imputabilidad a 13 años”.
Tras
ser suspendido la semana pasada por la sesión sobre el criptogate, la presidenta de la comisión de
Legislación, Laura Rodrigo Machado, convocó para el próximo miércoles a las
17.30 para deliberar en conjunto con las comisiones de Justicia, Familia y
Presupuesto, que presiden Manuel Quintar (LLA), Roxana Reyes (UCR), y José Luis
Espert (LLA), respectivamente.
La
intención del oficialismo, PRO, la UCR y Encuentro Federal es firmar un dictamen que estará basado en el proyecto del Poder
Ejecutivo y la docena de iniciativas impulsadas por legisladores de diferentes
espacios políticos. La baja de imputabilidad también es respaldada por los
diputados que responden al jefe del Frente Renovador, Sergio Massa.
La estrategia del oficialismo es tener el
miércoles firmado el despacho de mayoría para tratarlo en la primera quincena
de mayo, informaron fuentes parlamentarias. La iniciativa ya se debatió en siete reuniones el año pasado y este año
hubo dos reuniones, una el 12 de marzo y otra el 19 de marzo, previo a la
sesión en la que se debatió el acuerdo con el FMI.
Si bien el Gobierno quiere establecer la edad en 13 años para condenar a un menor que cometió un delito grave, el consenso que hoy existe es que se puede bajar la edad hasta los 14, como proponen, entre otros, el diputado massista Ramiro Gutiérrez. El proyecto del Gobierno establece que no se le podrá imponer al menor una pena de reclusión perpetua y que será el máximo de prisión de 20 años, aún si la escala penal fuera más elevada producto de la concurrencia real de varios hechos independientes.