Ultra mega archi súper querido por todos y todas. Muy poca gente sabe su nombre. Lo vas a ver tocando el bajo, la batería, la guitarra o haciendo coros, y todo lo hace bien. Melómano empedernido. La gente de la cultura del futuro, va a hablar de él. Llega a "Las cinco de..." BHInfo: El Calva.
1- ¿Cómo ves el momento de la cultura local?
La verdad que veo a la cultura de la ciudad mas floreciente que nunca. No tengo recuerdo de un momento tan intenso en cuanto a propuestas artísticas. También siento que la gente esta acompañando, cosa que antes pasaba menos. Creo que tiene que ver a la calidad de los proyectos que hay. Hay gente haciendo cosas increíbles a la vuelta de tu casa, y preocupándose porque salga lo mejor posible a la hora de mostrarlo, cosa que antes también pasaba menos.
2- ¿Quién crees que debería ser un referente histórico de Bahía Blanca en cuanto a cultura?
Se que ha sido nombrado innumerables veces, pero tengo que decir que Raúl Soto fue nuestro gran referente. No solo por su increíble caudal artístico, sino porque fue un tipo que no solo tocó en todo la patria, sino también por América Latina y Europa. Tuvimos la suerte de que toque en Andr0 en los últimos dos años de su vida y no paraba de fascinarme por las cosas que me contaba. Literalmente podría haber sacado un libro de la cantidad de anécdotas que tenia, una mas desopilante que la otra. Fue un tipo que tocó por todo el mundo. From Bahía Blanca to The World, como siempre le solía decir.
3- Si tuvieses que contarle a alguien que no es de Bahía Blanca que tiene para disfrutar en materia cultural ¿Qué le dirías?
Le diría que, al igual que no hay que comprar el paquete turístico cuando vas a una ciudad que no conocés, siento que la cultura palpita en los lugares donde no están hechos para tocar o presentarse con un proyecto. Hay muchos lugares que nos abren las puertas de buena fe (y porque les sirve) donde quizás la infraestructura es escasa, pero que suceden cosas que por ahí no pasan en un lugar profesional, por así decirlo. Eso si, a la persona le gusta el Under y meterse en lugares donde hay incertidumbre, para mi, esos son los mejores lugares. Y sino, por supuesto, le diría que vaya a conocer nuestro majestuoso Teatro Municipal, uno de los mejores a nivel país y, por lo que tengo entendido, del continente.
4- ¿Cuál fue tu momento de mayor felicidad, con respecto a tu actividad cultural?
Tengo muchísimos (por suerte) y muy variopintos, pero si tengo que elegir uno diría que fue cuando tocamos con Roberto Monstruo en el CCK. Jamás en mi vida vi un lugar tan pero tan profesional. Con gente que, literalmente, te preguntaban si te sentías cómodo, si necesitabas algo, que no dudáramos en preguntar por cualquier inquietud. Bueno, por algo está entre los 3 mejores centros culturales del mundo, junto con otro de New York y otro de Japón. Estar en ese edificio tan histórico para el país, en el camarín mas cómodo que vi en mi vida y que daba directamente al letrero del Luna Park, es una imagen que tendré siempre en la retina. Encima ese día tocamos re bien, cosa que no es un detalle menor, estábamos extremadamente nerviosos, nos temblaban las patitas.
5- Nombrá 3 personas de la cultura actual bahiense que te causen admiración por lo que generan.
Bueno, la gente que me genera admiración es muchísima pero voy a nombras tres personas que para mi vida fueron cruciales.
El primero es Maximiliano "Chacho" Carrari, baterista de Serebrios. Cuando era chico y los iba a ver, para mi era como estar viendo a The Clash, o por lo menos lo mas parecido que tenia cerca jaja. Después de un tiempo, Chacho abrió una sala de ensayos en su casa, y yo siempre iba a ensayar ahí. Ahí lo pude conocer y me develó, de la manera mas humilde y sin necesidad de hacerlo, muchísima data del instrumento y de música en general. En una de esas tardes fue que me enteré que el era quien hacia las canciones, las letras, pensaba en la propaganda, en la vestimenta, en lo que se iba a decir en el recital. Ahí caí que era el Monje Negro de Serebrios, lo cual despertó mas admiración aun.
Otra persona que me dejo atónito la primera vez que la vi tocar fue María Paula Miner, baterista de Die Explosiven, Castradas, Severinas y Todos Son Culpables. No parecía que estaba tocando la batería, parecía que se estaba exorcizando. Nunca lo hablé con ella, pero me daba la sensación de que no pensaba en cosas lindas cuando tocaba. Y hoy por hoy yo hago exactamente lo mismo: cada vez que toco pienso en todas las cosas que me duelen de la vida en general, justamente para exorcizarme yo también.
Y por ultimo, y no menos importante, César Maina, con quien trabajo hace 13 años y aprendo todos los días de mi vida, constantemente. Conocerlo a Cesar fue un faro en mi vida, no solo por su amistad y porque me permitió vivir de lo que me gusta, sino porque cuando parece que ya no tiene nada mas para enseñarme después de tantos años, siempre me sorprende. Su sala de ensayo es un punto neurálgico de la cultura musical, y tengo la suerte de trabajar ahí. Ahí se han gestado recitales, festivales, discos, colaboraciones y un sin fin de cosas que enriquecen a la movida de Bahía Blanca. César me enseñó de música, de instrumentación, de grabación, de como atender a la gente y de tirarle siempre "la alfombra roja" a todas las personas que pasan por la sala y el estudio, y esa enseñanza trato de llevarla a todos los ámbitos de mi vida.