Por Nicolás Fernández
(@nicofernandezrelator)
Así tenía que ser, Olimpo. Sufriendo,
jugándose el todo por el todo, sobre
el final, implorándole al cielo, con los jugadores llorando en pleno campo de
juego. El “Aurinegro”, en un partido que
tuvo absolutamente todos los condimentos, le ganó 2-
Fiel al estilo del entrenador Gastón Lotitto, y sumado a las obligaciones que tenía Olimpo de ganar por dos goles de diferencia, el local salió con un planteo muy ofensivo, con jugadores de buen pie en la mitad de la cancha: Espejo, Segovia y Coacci, más el “Colo” Acosta como referente de área.
Precisamente Lionel Segovia, a quien le cometieron el primer penal del encuentro, y Acosta, que lo transformó en gol a los 15 minutos de la etapa inicial, le dieron el empujón que el “Aurinegro”, repleto de mazazos en el último tiempo, necesitaba para encarar lo que restaba del trámite con la convicción de que podía dar vuelta la serie.
Así terminó la primera fracción, con el local arriba por la mínima. Después, todo lo que ocurrió en el complemento fue lo más parecido a una película de suspenso y dramatismo. Androetto se fue expulsado en el conjunto rafaelino y, de ahí en más, Olimpo generó un sinfín de situaciones para marcar el gol de la clasificación. También la visita contó con varias contras (defensivamente los de Lotitto siguen dejando dudas) y hasta un tiro en el palo de López. Fue un segundo tiempo muy emotivo. Para el “Aurinegro” lo tuvieron Coacci, Vega, Albertinazzi, Vila y hasta el propio Acosta con un segundo penal, a 10 del final, que tapó el arquero Fragueda.
Fue a los 44 (el “Aurinegro” ya se veía jugando la próxima temporada del Federal dentro de cinco meses) cuando el “Pipa” Fernández capturó un rechazo de la defensa rival en la mitad de la cancha, tiró un caño fenomenal y sacó un centro de zurda mucho mejor, para que entre Osinaga y Centurión, uno de cada equipo, marquen en las alturas el gol del desahogo. Terminó siendo más de Centurión, pero Osinaga lo gritó como si fuese propio. Fue un gol de todo Olimpo, que vivió el partido como una final, aún sabiendo que falta muchísimo camino por recorrer. Pero por lo vivido en las últimas semanas, llenas de golpazos, el pueblo aurinegro celebró este triunfo como si no hubiese un mañana.
Imágenes: gentileza Simplemente Aurinegro y Voces Aurinegras