Adoptar un perro es una práctica habitual en las familias argentinas. Los cuidados de la mascota conllevan una gran responsabilidad, entre las que se encuentra la aplicación a tiempo de todas las vacunas correspondientes.
Para cuidar la salud de un perro y evitar que se contagie de
enfermedades graves, algunas de las cuales podrían ser trasmitidas a las
personas, es indispensable cumplir con el calendario de inmunizaciones.
Aunque lo recomendable es que la planificación esté
organizada y aprobada por un veterinario profesional, también es importante
conocer qué vacunas hay que aplicarles a las mascotas y a qué edad.
Para evitar que los perros contraigan enfermedades que pueden ser graves, e incluso mortales, es importante cumplir el calendario de vacunación que se inicia entre los 45 y 60 días de vida. Algunas de las patologías que afectan a las mascotas también pueden transmitirse a los humanos, de manera que la medicina preventiva es fundamental para las familias que conviven con ellos.
El calendario de vacunación cambia por los avances científicos y la aparición de nuevas enfermedades, como fue el caso del coronavirus.
Las vacunas son realmente efectivas si la salud del perro es buena, está desparasitado y su sistema inmunológico es lo suficientemente maduro. Además, es necesario aplicar los refuerzos en el tiempo estipulado. Para ello es fundamental tener en cuenta los plazos que indica el veterinario.
Calendario de vacunación para perros
A las 6 semanas: Primovacunación o primera vacuna polivalente. Puede ser un poco antes o un poco después, dependiendo de la edad del destete.
A las 8 semanas: Polivalente (adenovirus 1 y 2, moquillo,
parainfluenza y parvovirus).
A las 12 semanas: Refuerzo de la Polivalente (adenovirus 1 y
2, moquillo, parainfluenza y parvovirus) y leptospirosis.
A las 16 semanas: Rabia. Es una vacuna obligatoria por ley
en la mayoría de los países, ya que la enfermedad de la rabia puede
transmitirse a los humanos. La rabia es una enfermedad mortal y zoonótica.
Anualmente: Refuerzo de la Polivalente (adenovirus 1 y 2,
moquillo, parainfluenza y parvovirus), leptospirosis (esta también puede
aplicarse semestralmente) y de la Rabia.
Hay que tener en cuenta que las vacunas pueden tener efectos
secundarios que afectarán a los perros, por lo que es importante preguntar al
veterinario cuáles son y cómo tratarlos.